Para crear dispositivos y tratamientos de bajo costo que ayuden a mejorar la salud de la población más vulnerable, la UNAM instaló la Unidad de Investigación y Desarrollo Tecnológico del Centro de Ciencias Aplicadas y Desarrollo Tecnológico (CCADET) en el Hospital Doctor Manuel Gea González.
Las investigadoras María Soledad Córdova e Isadora Martínez Arellano están a cargo del proyecto de elaboración de un suplemento alimenticio para pacientes de cirugía post bariátrica, hecho con harinas de cereales y leguminosas, y que ha implicado desde diseñarlo, su procesamiento, realizar pruebas de vida de anaquel, sensoriales, de aceptación y tecnofuncionales, entre otras actividades.
"Después de varios ensayos, ya tenemos un primer producto que puede ser sometido a un protocolo clínico", sostuvo María Soledad Córdova.
En tanto, Miguel Ángel Bañuelos, coordinador de la unidad, explicó que a partir de la bioelectrónica desarrolla un neuroestimulador para ayudar a atender problemas gástricos y de estreñimiento crónico que, además de generar fuertes dolores, son un riesgo para la salud pues no permiten a los pacientes liberar bacterias y toxinas, las cuales pueden generar infecciones.
Igualmente, Leopoldo Ruiz Huerta, quien forma parte del Laboratorio Nacional de Manufactura Aditiva, Digitalización 3D y Tomografía Computarizada (MADiT), indicó que se trabaja en trócares para cirugía laparoscópica, con componentes que puedan ser reutilizables. Estos dispositivos son los puertos de acceso para las cirugías abdominales.
El Hospital General Manuel Gea González, agregó el investigador, se ha especializado en este tipo de intervenciones quirúrgicas y los trócares están directamente asociados a los costos de las mismas. "Al menos se requieren tres de ellos por cada cirugía, dependiendo de su especialización. La idea es trabajar en uno que pueda ser reusado en la mayoría de sus componentes".
Alberto Caballero Ruiz, adscrito también al MADiT, dijo que labora en sistemas de medición de presión en dos de las estructuras del sistema gástrico -estómago y esófago- que ayudarán en la atención de pacientes con padecimientos como disfagia -la imposibilidad de tragar-, esófago de Barrett y esófago de cascanueces.
Finalmente, el académico Alfonso Gastelum Strozzi trabaja en un sistema de visión por computadora para analizar destrezas de cirugía laparoscópica. Actualmente los médicos presentan un examen de habilidad que consiste en hacer amarres y nudos a contra reloj.
La ventaja de estudiar sus aptitudes por computadora es que permitirá conocer la velocidad de sus movimientos y contar con mayor información para tener una evaluación menos subjetiva de la capacidad del futuro cirujano, expuso el coordinador de la Unidad, Miguel Ángel Bañuelos.