316387543
Bacterias humanas al borde de la extinción:Investigador de la UNAM
  • Luis Eduardo Servín, investigador de la ENES Morelia de la UNAM, ha realizado estudios de la diversidad genética de microorganismos en sitios extremos

21 de marzo de 2017

Las mariposas monarca son capaces de vivir el invierno sin alimento en los bosques de México, meses después de migrar, mediante mecanismos metabólicos accionados por un tipo de bacterias descritas por investigadores mexicanos, encabezados por Luis Eduardo Servín, investigador de la Escuela Nacional de Estudios Superiores (ENES) unidad Morelia, de la UNAM. 

El trabajo desarrollado por el joven investigador (30 años) inició en su doctorado en ciencias biomédicas, donde llevó a cabo un proyecto para estudiar los microorganismos asociados a estas mariposas cuando se encuentran en los bosques de oyamel del estado de Michoacán. "Por ser michoacano me interesé por saber qué microorganismos estaban asociados a las mariposas. Por eso, iniciamos su estudio desde 2008 y desde entonces hemos seguido el análisis intermitente de sus comunidades". 

Así fue como detectaron que la monarca poseen una bacteria del tipo Comensalibacter a la que bautizaron papalotli, la cual les permitiría resistir el invierno sin alimento. "Hemos visto en el laboratorio que la  Comensalibacter papalotli produce ácidos orgánicos y es altamente probable que también lo produzcan en el interior de la mariposa y así pueda regular su metabolismo o poblaciones de patógenos", explica en entrevista. 

El especialista refiere que hay muy pocos ejemplos de microorganismos asociados a especies de insectos migratorios que presenten estas características, algo que fue una motivación importante para realizar este tipo de estudio. Lo que se conoce es que existen comunidades de bacterias similares que generan ácido acético en insectos como las moscas de la fruta, abejas y abejorros, las cuales son fundamentales porque participan desde su crecimiento hasta su etapa reproductiva. 

Al igual que los insectos, el hombre y todo ser vivo se beneficia de la actividad bacteriana dentro y fuera del organismo, a esta comunidad se le llama microbioma y es uno de los temas de investigación de frontera más inquietante en todo el mundo, porque todavía se desconoce mucho de esta biodiversidad y el impacto benéfico que tiene. Sobre esta biodiversidad y su importancia, Servín Garcidueñas acota que la vida se clasifica, desde el punto de vista molecular, en tres dominios bacterias, arqueas y eucariotas. "Son los grandes dominios: de la vida y la mayoría son unicelulares o multicelulares microscópicos, por lo cual no podemos verlos e interactuar directamente, pero están en todos los aspectos de la vida".

Además tienen muchas aplicaciones que podrían ser útiles para el hombre, ya que los microorganismos han estado en la Tierra por miles de millones de años, más de la mitad de la historia geológica del planeta ha sido colonizada por microbios. "Es por ello que podemos explorar la gran diversidad de enzimas o genes o metabolitos que pueden ser utilizados para beneficio humano".

MICROBIOMA HUMANO

Por sus destacadas investigaciones, el joven especialista en microorganismos fue recientemente nombrado Joven Embajador de la Asociación Americana de Microbiología. Servín también ha realizado estudios sobre la diversidad genética de microorganismos en sitios extremos, y explorado la diversidad de bacterias asociadas a las plantas leguminosas, en específico, a los frijoles. Para impulsar el estudio de cómo se establecen las comunidades microbianas y cómo interaccionan entre sí, en diciembre de 2016 se fundó el Laboratorio de Microbiómica en la ENES Morelia, del cual el joven académico de 30 años forma parte. 

El investigador menciona que se encuentran en la búsqueda de recursos para realizar estudios en diversas áreas de investigación, como el microbioma humano. "Michoacán es un estado con una fuerte producción de alimentos, por lo que nos gustaría saber qué microbios están en nuestra comida. A veces no se estudia directamente a los microbios del humano, sino otros modelos para comprender fenómenos de las comunidades microbianas y que después se pueden aplicar al hombre. Los microbios que comemos impactan los que tienes en el intestino, por lo que saber qué hay en el ambiente puede tener un impacto en conocer qué tenemos en el cuerpo". 

Hay mucho que se desconoce sobre el microbioma humano y cada nuevo conocimiento que se tiene sobre éste asombra cada vez más. "Tenemos microbios en la piel, nariz, pulmones, intestino, aparato reproductivo -algunos de los cuales pueden causar, a lo largo de los años, tumores en vías orales... (por un contacto sexual)-, en todo el organismo, y lo que se sabe sobre ellos puede además ser muy llamativo para la población en su día a día". Los hábitos de lo que comemos o de higiene personal, ejemplifica,  son fundamentales para nuestra salud. 

"Al levantarnos por las mañanas lo primero que hacemos es ponernos detergentes y bañarnos con agua muy caliente, lo cual mata a millones de microbios que son buenos, estas prácticas de higiene extrema, o cambios en los hábitos de la comida, afectan a nuestros microbiomas". 

El científico añade que en el mundo hay proyectos de investigación para obtener y estudiar microorganismos de comunidades humanas nativas en todos los continentes. "Buscan tomar muestras de heces, por ejemplo, porque, y aunque sea difícil de creer, hay microbios asociados al hombre que están en proceso de extinción por este tipo de prácticas a las que nos lleva la vida moderna". 

Fuente: UNAM

Ver más noticias


Su IP: 18.219.176.215 no esta registrado. Por favor ingrese su clave de Acceso Remoto.