Comunicar de forma correcta la ciencia es un estímulo para acercar a los jóvenes al conocimiento, señaló Bruno Monflier, astrónomo francés y creador de la Noche de las Estrellas en Francia, en entrevista para el Foro Consultivo Científico y Tecnológico.
"Puede ser relativamente fácil organizar una Noche de las Estrellas por año, lo importante es que cada año venga más y más gente, y quien está detrás de este interés es el comunicador; depende de él, si él es buen comunicador, la gente entonces se va a interesar y va a venir".
Luego de la conferencia "La historia de la Noche de las Estrellas en Francia", que se realizó hoy en el Museo de Ciencias Universum, de la Dirección General de Divulgación de la Ciencia de la Universidad Nacional Autónoma de México (DGDC-UNAM), Monflier destacó que en Francia existe una tradición de astronomía muy antigua y un fuerte interés por esta ciencia, por lo que existen muchos clubes de astronomía, los cuales han estado presentes desde un inicio en la Noche de las Estrellas, desde el año 1991.
Para el astrónomo, México y Francia son dos polos principales de esta gran fiesta astronómica, y ha observado que en nuestro país ha crecido con gran éxito este evento pasando de alrededor de 12 sedes en su primer año, a 91 en esta nueva edición a nivel nacional, más 6 sedes en países de Latinoamérica como Colombia y Argentina.
También explicó que en el caso de la Noche de las Estrellas, lo que se requiere en cualquier país son dos elementos: "Una persona o grupo de personas que tengan la voluntad de desarrollar un evento como la Noche de las Estrellas y en el caso de México, por ejemplo, José Franco. En el caso Francia fueron dos o tres asociaciones civiles; y el segundo elemento es que haya una red de gente capaz de generar interés, porque si una persona sola tiene la voluntad de hacer algo y no hay sedes o gente que esté dispuesta a hacer algo, no va a pasar nada. Hay que ver cómo generar este interés y para cada país es diferente, la realidad no es la misma en Brasil, que en Colombia, en China o Argentina".
El origen de la Noche de las Estrellas
Ante un auditorio lleno de niños, el astrónomo francés Bruno Monflier explicó que el origen de la Noche de las Estrellas data del año 1991 en el país europeo bajo el nombre "Noche de las estrellas fugaces", con el objetivo de observar los cuerpos estelares, sin embargo, pocos años después se dieron cuenta que no es posible en muchas ocasiones observar el fenómeno.
"En Francia no tenemos la suerte que tienen ustedes en México, allá hay nubes, lluvia y no es siempre posible ver las estrellas, porque el cielo está cubierto, entonces decidimos no solo hacer una noche, sino tres Noches de las Estrellas para aumentar la posibilidad de verlas", destacó el especialista.
Bajo la idea de sensibilizar al público (particularmente a los niños y jóvenes) a la ciencia en general, y que un máximo de gente se interese y pueda practicar la astronomía, surgió la Noche de las Estrellas en Francia, la cual, a la fecha ha generado resultados muy positivos para la comunidad.
"Hoy en día hay 30 por ciento más de gente inscrita a un club de astronomía, son 2.5 millones de personas que tienen al menos una actividad astronómica al año; 17 escuelas de astronomía y 11 paradores de noche (lugares dedicados a observar las estrellas)", destacó Monflier.
Además, se han desprendido otros proyectos nacionales como "Sideral", el cual tiene como objetivo sensibilizar a 20 mil jóvenes a la astronomía, para formar 300 animadores y 50 formadores.
En la charla también estuvieron presentes José Franco, director general de la DGDC y coordinador general del Foro Consultivo Científico y Tecnológico y Gabriela Guzzy, directora de Universum.
En 2007, la Embajada Francesa en México invitó a Monflier para celebrar la primera Noche de las Estrellas en México. Este sábado 3 de diciembre, a partir de las 12 del día, se llevará a cabo la octava edición de esta fiesta científica y astronómica en México en "Las Islas" de Ciudad Universitaria de la UNAM y en 91 sedes del país.