Ante ello, una tarea obligada para el país consiste en abonar a la preservación del medio ambiente, a los ecosistemas y a las especies que los integran. Para hacerlo, la labor del sector académico es de suma importancia; en ese contexto, cobra gran relevancia la existencia de la Sociedad Científica Mexicana de Ecología (SCME), la cual fue fundada el 2 de septiembre de 2005.

En entrevista con la Agencia Informativa Conacyt, el doctor Miguel Martínez Ramos, presidente de la Sociedad, charló acerca de su labor y la importancia que tiene en un entorno donde la investigación relacionada con ecología representa una de las áreas de mayor fortaleza científica en el país.

Agencia Informativa Conacyt (AIC): ¿Cuándo y por qué surge la Sociedad Científica Mexicana de Ecología?

Miguel Martínez Ramos (MMR): La SCME fue fundada en 2005 con el propósito de aglutinar o agrupar a los científicos, estudiantes y profesionales interesados en la ciencia de la ecología, ello para impulsar dicha área del conocimiento en nuestro país.

Se trata de una asociación civil con registros de personas que laboran de manera activa con investigación científica en materia de ecología, de profesores que realizan enseñanza en este campo, de estudiantes inscritos en programas regulares de licenciatura o de posgrado, así como profesionales que trabajan de manera directa en algún campo de la ciencia ecológica. A la fecha contamos con un registro de más de mil investigadores, profesores, estudiantes y profesionales.

AIC: ¿Cuáles son las principales actividades de la Sociedad?

MMR: Habitualmente realizamos el Congreso Mexicano de Ecología cada dos años. Desde que nació la Sociedad se han realizado cinco ediciones de este congreso en diferentes ciudades del país (Morelia, Mérida, Veracruz, Villahermosa y San Luis Potosí) y el número de participantes ha crecido de ochocientos a casi mil quinientos.

Estos congresos representan el foro más importante de México para la difusión de los hallazgos más recientes de la ecología como ciencia, para el encuentro entre investigadores, profesores y estudiantes y para el acercamiento y diálogo de académicos y representantes de otros sectores de la sociedad interesados en el tema de ecología y medio ambiente.

En el congreso se ofrecen conferencias magistrales con temas de frontera, impartidas por destacados ecólogos nacionales y del extranjero. Asimismo, se llevan a cabo simposios que abordan temas específicos, sesiones de presentaciones orales y de carteles, talleres, mesas redondas, presentaciones de libros, cafés científicos (pláticas entre académicos y público en general) y excursiones a campo, sobre todo con investigadores que quieren exhibir aspectos importantes de sus investigaciones in situ, en los lugares cercanos a las sedes del Congreso.

A la par de ello, cada año realizamos un simposio especial con algún tema relevante que se encuentre sobre la escena internacional. Por ejemplo, el año pasado tuvimos una edición que significó una síntesis del avance de la ecología en México, sus retos y perspectivas a futuro. Además, a través de la página de la Sociedad se ofrece de manera regular información sobre eventos, cursos y diferentes actividades relacionadas con la ecología en México y en el mundo. 

AIC: ¿Quiénes integran la Sociedad y cómo se adhieren los interesados?

MMR: La Sociedad cuenta con un consejo directivo que es renovado cada dos años mediante la votación de los miembros activos, es decir, aquellos que mantienen su membresía de forma regular. Este consejo es integrado por cinco académicos: un presidente, un vicepresidente, dos secretarios y un tesorero.

Ellos se encargan de coordinar, organizar y promover las actividades de la Sociedad y de revisar cada solicitud de ingreso de los aspirantes. Para su funcionamiento, la SCME tiene también a seis presidentes regionales que promueven las actividades de la Sociedad en las regiones noreste, noroeste, mesa central, occidente, oriente y sur de nuestro país. 

En la revisión de solicitudes de ingreso a la SCME, el consejo directivo se asegura de que a esta sociedad se sumen sólo personas activas en la investigación, la enseñanza y la actividad profesional en ecología, así como jóvenes que forman parte de un programa de licenciatura o de posgrado, o que apoyan de manera activa algún tipo de trabajo académico relacionado con la materia.

Ello obedece a que la Sociedad busca concretar un cuerpo académico robusto que ayude al avance de la ecología como ciencia en México, pero que al mismo tiempo este avance se vincule directamente con problemas de tipo ambiental que aquejan al país.

AIC: ¿Se da seguimiento al trabajo realizado para garantizar mejores resultados?

MMR: Ese es un reto que estamos abordando día con día con las actividades que promueve la SCME. Así, por ejemplo, en diciembre pasado, luego de un simposio nacional que abordó la situación de la investigación de la ecología en México, sus retos y perspectivas, se comenzaron trabajos de síntesis que ofrecerán un panorama de la situación de la ecología en México. 

El primer trabajo es un artículo que será sometido a una revista internacional con el fin de difundir lo logrado en México en el contexto internacional, en campos que van desde la ecología molecular hasta aquellos que se encuentran en la intersección de la ecología con las dimensiones humanas, tales como el cambio global y la sustentabilidad y resiliencia de sistemas socioecológicos.

Un segundo esfuerzo de síntesis será la publicación de entre doce y quince artículos que darán cuenta de dichos avances pero de una manera más detallada y que se espera formen un suplemento especial en una revista científica mexicana.

Un tercer producto que se está implementando en el portal electrónico de la SCME es una plataforma que incorpore los artículos, capítulos de libros, libros y otros documentos que se desarrollen en torno a la ecología, ello con el objetivo de que estén disponibles para el público en general y al mismo tiempo sirvan como material de consulta para investigadores y estudiantes.

AIC: ¿Cómo subiste la Sociedad, cómo hace para mantener el ritmo de trabajo actual?

MMR: Contamos con varias fuentes de ingreso que sostienen las actividades promovidas por la SCME, las cuales van desde las cuotas de membresía a la Sociedad, las cuotas de participación en los congresos y simposios, hasta la captación de recursos extraordinarios a través de programas de apoyo de diferentes instituciones incluyendo universidades, centros de investigación, fundaciones que apoyan el avance de la ciencia, asociaciones públicas, instancias de gobierno y el propio Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), entre otras.

AIC: ¿Cuál es la importancia de contar con una Sociedad de esta naturaleza en México?

MMR: La ecología es una ciencia que está vinculada íntimamente con nuestra vida diaria ya que muchos elementos físicos, químicos y biológicos que hacen posible la existencia de los seres humanos surgen en el contexto de los ecosistemas.

Todos los alimentos, muchos productos que usamos para vestir, para construir y otros como medicinas, el oxígeno que respiramos, el agua que bebemos y la calidad del suelo en que cultivamos, son resultado de los distintos fenómenos que ocurren en los ecosistemas, en la interacción que se da entre los microorganismos, las plantas y los animales y entre estos y su medio ambiente físico y químico.

De hecho, nosotros somos parte de los ecosistemas y la ecología provee conocimiento fundamental para entender cómo desarrollarnos como individuos y como sociedades de una manera sostenible. 

En el caso de México, al tratarse de un país megadiverso, es fundamental contar con la información que los ecólogos generan para saber qué ecosistemas tenemos en nuestro territorio, cómo funcionan, cuál es su fragilidad ante alteraciones naturales y las generadas por nuestras propias actividades, y utilizar ese conocimiento para tomar decisiones sobre el manejo de los ecosistemas, sus recursos y servicios que sean racionales (no degradantes) sobre el entorno natural.

Debemos utilizar toda la información que aporta la investigación en ecología para generar políticas públicas congruentes con las propiedades naturales de los ecosistemas, para no sobrepasar sus límites de resistencia y recuperación al ser impactados por algún uso humano, para entender cómo tomar decisiones para conservar y restaurar los ecosistemas.

Asimismo, para entender cómo distribuir las acciones productivas sin causar la degradación o, aún peor, la extinción de los ecosistemas; hasta cuestiones muy prácticas de qué hacer para no lastimar los ecosistemas paulatinamente con nuestras actividades diarias.

AIC: Finalmente, ¿cuál es el papel de México en cuanto al desarrollo de ciencia ecológica se refiere?

MMR: Hay pocos campos de la ciencia en México que son tan reconocidos a nivel internacional como es el caso de la ecología. Por ejemplo, la astrofísica tiene un muy buen nivel global, pero la ecología también puede estar entre las primeras cinco grandes áreas de investigación en el país.

Los investigadores mexicanos realmente tienen una contribución y reconocimiento importantes. Se puede decir que existe una escuela ecológica de México, sobre todo en temas de ecología de bosques tropicales, ecología de las poblaciones, ecología de las comunidades y de ecosistemas; en términos relativos, estamos entre los primeros niveles de producción científica en América Latina.

Argentina, Brasil, Chile y México representan el cuarteto de las naciones que más influyen en esta región del mundo en el desarrollo de la ciencia de la ecología.